El agua del ELC
Aunque el agua se convirtió prácticamente en todo el Sexto Mundo en un negocio a comienzos del siglo 21, en el ELC la situación ha sido peor debido a su desertización y ha habido problemas con el agua desde el siglo 20.
En el ELC, los mayores magnates del agua son los descendientes del matrimonio Resnick original de los 60 del siglo 20, que han heredado sus negocios, destacando su principal empresa The Wonderful Company (sic), una doble A con previsiones alcistas.
Actualmente la familia Resnick tiene el monopolio práctico del agua en el ELC, lo que les convierte en una familia con influencia a nivel de Norteamérica.
La sede de la doble A The Wonderful Company ha estado desde su fundación en 1979 en LA City (11444 West Olympic Blvd, Westside), desde donde se controlan sus subsidiarias y sus actividades en 5 continentes, generando beneficios anuales de varios miles de millones.
Enfrentada a esta megacorp se encuentra California Azul, un policlub que fomenta la cultura de la responsabilidad hídrica en los ciudadanos, y la toma de conciencia de la necesidad de la soberanía hídrica (defendiendo pantanos como Oroville y Monticello que el partido liberal se ha propuesto privatizar) y energética, defendiendo granjas de sol como Ivanpah (a Km de Las Vegas en Mojave), o centrales nucleares de fisión reconvertidas a fusión como Demon Canyon (Ávila Beach, San Luis Obispo) o Vallecitos (SanFran, Pleasanton), o centrales de fusión modernas como California Hearth (SanFran, San Mateo).
En el ELC un litro de agua embotellada cuesta unos 5$, 10$ en LA, de los que buena parte se queda normalmente en The Wonderful Company.
Los racionamientos de agua son normales, y muchas ciudades tienen su suministro en manos de los Resnick cuando el estado no es capaz de proporcionar el agua.
La junta estatal del agua es un órgano anterior a la independencia del ELC, que se divide en 7 juntas regionales y se encarga tanto de participar en la legislación del uso del agua como de velar por su calidad y controlar los recursos estatales como los embalses, la red de regadío del valle central (Central Valley Project) o la tubería de 900 km que sirve de acueducto (California Water Project).
En realidad, la Junta no tiene en cuenta a los californianos ni a los pequeños agricultores, ya que a menudo sus técnicos están comprados por las megacorps y por The Wonderful Company en concreto, según denuncias de California Azul.
Las guerras del agua
Esta indefensión causó el nacimiento de la Asociación Californiana de Agricultura y Agua (CAWS), y la Unión de Pequeños Granjeros (SFU) que representan a los pequeños agricultores.
Ambas asociaciones están integradas en California Azul, y a menudo colaboran entre sí o salen al campo a sabotear granjas automatizadas e instalaciones corpo para luchar por su derecho al agua.
Las guerras del agua es el nombre que recibieron esta serie de escaramuzas y sabotajes entre CAWS, SFU, y quizás otros, cuando fueron muy activas en los 50.
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