Dejadme el dínero físico, hijos de puta



Ya lo dije; una cosa es la privacidad, concretamente la privacidad de los pagos y otra es que las transacciones digitales ya están quitando control al ciudadano respecto a la moneda física (de forma identica a lo que pasa con software comprado que posees, que es ya software comprado como servicio al que solo accedes, vease Adobe en Venezuela)

Es el panorama que quieren meternos a futuro, y eso, como tantas cosas que están pasando en la vida real (trabajo, economía, pederastia, fascismo, educación, salud, juego, soledad en la tercera edad...) es para preocuparnos y que la sociedad empiece a esforzarse en reaccionar.

Comentarios

Entradas populares