Drácula Dossier

1876-1893: La iniciativa Hawkins

Durante la guerra de Oriente, también llamada guerra ruso-turca de 1876-1878, el estamento militar británico observó con interés cómo su vacilante y poco fiable aliado luchaba contra su antiguo enemigo. Entre sus agentes se encontraban el doctor George Stoker, por aquel entonces cirujano de la Media Luna Roja, y el erudito Armin Vámbéry. Estos dos hombres eran considerados informadores fiables y dignos de confianza, así que cuando ambos informaron de extraños encuentros, casi sobrenaturales, en los Cárpatos, sus superiores se vieron obligados a tomarlos en serio.

Los primeros indicios de en lo que se convertiría la Operación Edom consistieron en una modesta investigación sobre el fenómeno de los «vampiros», en la que se aplicaba la luz de la ciencia moderna a una superstición campesina. El hombre que más tarde operaría bajo el nombre de guerra de Peter Hawkins planteó el problema a algunas de las mejores mentes científicas londinenses.

Se podía confiar en los miembros del Club X para montar un estudio científico genuino sin sucumbir al temor religioso.

Su examen inicial de los informes de Vámbéry y del folclore existente sugirió que había una gota de verdad dentro del mito. Del mismo modo, descubrieron indicios de que la Iglesia católica y otros gobiernos también podrían estar al tanto de estas criaturas.

Hawkins decidió que era un arma que merecía la pena perseguir. Al principio, este proyecto era una obsesión personal, sin la aprobación del Gobierno británico, pero después de que Hawkins ganara influencia dentro de la nueva División de Inteligencia Naval (o su control sobre ella) en 1887, pudo aportar la fuerza financiera y organizativa necesaria para abordar el problema. Reclutó más agentes e informadores en Rumanía, así como a un pequeño número de confidentes y expertos en Inglaterra en los que se podía confiar para tratar con lo sobrenatural.

Hawkins y sus agentes concibieron un plan, la Operación Edom, con el objetivo de traer un vampiro a Inglaterra. Este conde vampiro sería atraído con la promesa de nuevos cotos de caza en Londres. Las «víctimas» adecuadas serían arrastradas hacia el camino del conde. Una vez que una de ellas se convirtiera en vampiro y estuviera controlado, el vampiro extranjero y más peligroso debía ser encarcelado o destruido, mientras el vampiro inglés podría ser estudiado en condiciones seguras y controladas.

1893-1894: Drácula


¿En qué momento fracasó el proyecto Drácula? ¿Fue cuando este devoró a la tripulación de la Deméter y provocó que el barco encallara en lugar de atracar a salvo en Whitby? ¿Fue cuando Seward llamó a Van Helsing? ¿O cuando Kate Reed descubrió la existencia del círculo de seguidores de Drácula?

Todos los implicados en el caso –los directos, como Seward o Harker, y los que estaban en la sombra, como Hawkins y sus agentes– tenían motivos para ocultar el alcance de sus tratos con los no muertos.

El conde se retiró a su fortaleza en su hogar, perseguido por Van Helsing y los demás cazadores; Quincey Morris y Jonathan Harker infligieron heridas aparentemente mortales a Drácula, y pusieron fin a la amenaza del conde, por el momento.

Se acudió a Bram, el hermano de George Stoker, para que redactara el informe posterior a la acción. El Ministerio de Asuntos Exteriores ya había pedido a Bram Stoker que mejorara el valor propagandístico del libro de su hermano George ("Con los innombrables", unas memorias sobre su servicio médico en la guerra ruso-turca, en los Balcanes).
Edom, temiendo que la operación pudiese ser descubierta, optó por codificar el informe como una novela, para que incluso si saliese a la luz, no revelase nada y la negación fuese automática. 
 
Antes de crear el libro conocido como Drácula, Stoker escribió una versión anterior presentada a Edom que fue necesario censurar. Este Drácula no censurado fue guardado por Edom como una versión más completa del informe.
En el futuro, Hopkins fotografiará este informe, anotado por 2 analistas de Edom antes que él y construirá su propia copia del Drácula no censurado, lo que para Edom es una traición al duplicar el original.



1895-1917: Un asunto sombrío

A raíz del caso Drácula, la División de Inteligencia Naval reorganizó su sección sobrenatural. Hawkins –o su sucesor– recibió un presupuesto secreto para contratar asesores expertos, cuyos nombres en clave serán los de los bíblicos duques de Edom. Edom pasó las dos décadas siguientes repasando «el viejo escenario en el que estaba, y está, para nosotros tan lleno de recuerdos vívidos y terribles».

Correlacionó y reexaminó con obsesión los relatos de los protagonistas, así como toda la preparación de la investigación llevada a cabo por el Club X y por las expediciones del NID a los Balcanes. Fue más lejos, envió arqueólogos y exploradores a Oriente Medio, desenterró sepulturas y tumbas de los suicidas en Transilvania y rastreó todos los rumores acerca de lo sobrenatural desde Groenlandia hasta Hong Kong.

Repasó los escasos premios de consolación de la operación original: unas pocas muestras de sangre, algunas pruebas recuperadas de los pisos francos del conde, los restos de algunas víctimas, así como fotografías, bocetos y pinturas de Aytown, y reliquias recuperadas de los dominios de Drácula. Asimismo, se iniciaron los primeros experimentos con el suero Seward, aunque esas investigaciones no darían fruto hasta pasados muchos años.

El miedo al contagio frenó a Edom en todo momento: la única conclusión definitiva que podía extraerse de la operación original era que habían tenido una suerte endiablada. Drácula podría haber creado un círculo mucho mayor de vampiros para hacer presa a millones de londinenses. Podría haber convertido a cientos, luego miles, en vampiros, en lugar del puñado que Edom conocía.
La tradición vampírica sugería que tales brotes no eran infrecuentes en el pasado, y que solo gracias a la rápida acción de los cazadores locales, unida a comunidades rurales relativamente pequeñas y aisladas, se pudo contener la maldición vampírica. La Inglaterra de principios de siglo no contaba con una tradición popular establecida para hacer frente a los vampiros, y el ferrocarril permitía que Londres estuviera a solo unas horas de cualquier parte del país. Un paso en falso podía desencadenar el desastre. El trabajo de Edom con lo que en la práctica era un arma biológica sirvió de base para el desarrollo de la Real Estación Experimental de Ingenieros en Porton Down en 1916. Las estaciones satélite de Edom se establecieron en lugares remotos, donde podían realizar experimentos e investigaciones con relativa seguridad.

La formación original de cazadores, así como aquellos otros que entraron en contacto con Drácula durante su estancia en Inglaterra, fueron vigilados. A algunos se les permitió volver a una relativa opacidad, aunque Edom continuó vigilándolos a ellos y a sus familiares. A otros se les buscó para reclutarlos, con el argumento de que los hombres y mujeres incondicionales que ya se habían enfrentado a Drácula una vez eran, sin duda, aptos para Edom. A otros los vigiló y no se acercó a ellos, desconfiando de sus verdaderas motivaciones y asociaciones. A otros se les vigilaba y se les abordaba una sola vez, y se concedían «indulgencias» para aquellos de los que no se podían fiar para que permanecieran en silencio.

Y, por supuesto, se pusieron en marcha salvaguardas para garantizar que Edom permaneciera oculta. La publicación de Drácula en 1897 fue solo una parte del encubrimiento. Carfax, por ejemplo, fue literalmente sepultado: la casa fue arrasada y se construyó una nueva calle sobre ella una década después de la salida de Drácula.

Sin embargo, al cabo de veinte años, Edom seguía sin estar cerca de lograr su objetivo original de conseguir un vampiro como agente. Ninguna propuesta, como segundo intento, se consideraba lo bastante fiable como para que mereciera la pena el riesgo de contagio.

1917-1940: Preservar el Imperio

Edom pasó a depender de la Oficina del Servicio Secreto en 1909. A medida que aumentaban las tensiones con Alemania y Rusia, la falta de avances de Edom hacía cada vez más difícil justificar la asignación de recursos al objetivo original de la operación. El personal a tiempo completo de Edom se redujo a un puñado de agentes y unos pocos envejecidos analistas, aunque la investigación del suero continuó bajo los auspicios del Departamento Experimental del Almirantazgo. Los ducados quedaron vacantes o se asignaron a trabajadores a tiempo parcial.

Edom sobrevivió como operación activa gracias al patrocinio de Winston Churchill. El futuro primer ministro se enteró de la existencia de la Operación Edom a principios del siglo XX a través de la masonería londinense (o puede que a través de otros medios), y descubrió sus pormenores cuando se reunió con Bram Stoker en 1908. Cuando Churchill se convirtió en primer Lord del Mar en 1911, se interesó especialmente por el potencial de Edom, y abogó en secreto por el regreso al castillo de Drácula durante toda su carrera.

Fue durante este periodo cuando los pocos analistas de Edom que quedaban empezaron a sospechar de la existencia de uno o más programas vampíricos paralelos. Edom seguía disponiendo de una excelente red de informadores y agentes en Rumanía, los Balcanes y partes de Oriente Próximo, así como de unos cuantos dispersos en lugares inverosímiles del planeta, pero estaba ciego ante los acontecimientos en las capitales del mundo.

Sus agentes podían documentar sobre arqueólogos alemanes excavando en las ruinas dacias, o levantar sospechas sobre grupos comunistas de Bucarest procedentes directamente de Moscú, pero sin mejores activos en Berlín o Moscú, Edom solo podía especular sobre sus homólogos.

1940-1941: Fase II de Edom

Churchill reactivó Edom el 9 de abril de 1940. Las instrucciones operativas iniciales eran las mismas que en 1894: conseguir los servicios de un poderoso vampiro para el Imperio británico. Edom propuso una misión conjunta con la Dirección de Operaciones Especiales, pero los acontecimientos se antepusieron a los preparativos. La pérdida de gran parte del noreste de Rumanía a manos de la recién creada República Socialista Soviética de Moldavia aumentó los temores de Churchill de que los soviéticos tuvieran su propio programa de vampiros y hubieran firmado el Pacto Molotov-Ribbentrop para ganar tiempo y reclutar a sus propios activos vampíricos.

El 30 de agosto, Alemania transfirió el norte de Transilvania a sus aliados húngaros: ¿posible tapadera para un programa vampírico nazi? Edom se apresuró a reunir, entrenar e informar a un equipo de comandos de rescate. El plan: lanzarse en paracaídas sobre Rumanía, contactar (o, si fuera necesario, despertar) al conde Drácula y ofrecerle el apoyo y reconocimiento de los Aliados, en el caso que deseara apoderarse de la Rumanía que quisiera y así mantenerla contra cualquier invasor extranjero o entidad nacional. La misión fracasó. El equipo de Edom se lanzó en paracaídas sobre Rumanía el 2 de noviembre de 1940. Sin embargo, por alguna razón, Drácula rechazó la oferta de los Aliados y prefirió esperar su momento.

En enero de 1941, el equipo de Edom se vio envuelto en un intento de golpe de Estado por parte del grupo fascista ocultista la Guardia de Hierro, por lo que los nazis irrumpieron en Rumanía, aplastando a la Guardia de Hierro al tiempo que ponían los yacimientos petrolíferos de Ploieşti bajo el control del Eje.

1941-1951: Edom en guerra

En el futuro, este segundo fracaso tendría repercusiones devastadoras para Edom, pero en tiempos de guerra había poco apetito para las recriminaciones. Aunque la misión en Rumanía no había logrado su objetivo principal de volver a Drácula contra el Eje, los informes de los supervivientes insinuaban con fuerza que los nazis tenían su propia operación de guerra sobrenatural. Volvieron a despertar los antiguos temores de que no se debía confiar en Van Helsing, y Edom sobrevivió posicionándose como la defensa del Reino Unido contra las armas ocultas. «D» evocaba imágenes de una Inglaterra invadida por vampiros nazis, insinuando que el empuje del Reich en Rumanía estaba motivado por otras preocupaciones más grandes que por el petróleo.

Edom estableció vínculos con el MI5, interrogando a presuntos espías alemanes y renfields en potencia. El jefe adjunto de la División B del «Cinco» Jasper Harker tomó la iniciativa en la búsqueda, a la postre infructuosa, de vampiros nazis o agentes dobles controlados mentalmente. Edom informó a los miembros de la Operación Autónoma antes de que se lanzaran en paracaídas sobre Rumanía el 22 de diciembre de 1943, y les indicó las pistas que podrían señalar la presencia de Drácula (incluyendo, irónicamente, la espesa niebla y los inesperados vientos que hicieron caer a los paracaidistas en manos de las fuerzas de seguridad rumanas).

Había hombres de Edom con la unidad de Asalto 30 de Ian Fleming cuando irrumpió en Alemania capturando archivos, y con la Operación Cirujano del MI6 capturando científicos nazis y secretos industriales. También había hombres de Edom susurrando al oído de Churchill en Yalta, desaconsejándole dar a los soviéticos influencia sin restricciones en Rumanía, pues sería un desastre. En sus negociaciones con Stalin, Churchill se reservó «un 10% de influencia de EE.UU./Reino Unido» en Rumanía, y tenía en mente un 10% muy concreto centrado en el desfiladero de Borgo.

1945-1956: La caza de monstruos

Después de la guerra, Edom luchó por mantener su identidad, mientras otras facciones de los servicios clandestinos intentaban destrozarla en disputas mezquinas. Sin el patrocinio secreto de Churchill, los enemigos trataron de robar los tesoros de Edom: la sección rumana del MI6 codiciaba las redes de Edom allí, y el Real Servicio Científico Naval seguía entrometiéndose en la investigación del suero. Mientras tanto, el 5 quería quedarse con parte de Edom, o bien excluir por completo al 6 del panorama de la contrainteligencia declarando que los vampiros no eran una amenaza que debiera tomarse en serio.

Mientras sus superiores peleaban y discutían en Whitehall, los oficiales de Edom sobre el terreno y tras el Telón cazaban vampiros y antiguos nazis por igual. La crisis de Suez de 1956 fue el último suspiro de la segunda no-vida de Edom: después de que la propuesta de su director de utilizar la magia para derrocar a Nasser fuera rechazada en favor de una invasión militar, y con Rumanía sólidamente en la esfera de influencia soviética, se le dijo a Edom que empezara a finiquitar operaciones.
 
1956-1977: Edom en la sombra
 
Una vez más, a los ojos de la oficialidad, Edom se redujo a unos pocos miembros clave del personal, unas pocas instalaciones apenas operativas y un pequeño equipo de investigación. Esta vez, sin embargo, «D» y sus duques estaban preparados para la retirada de la sanción oficial. Los aliados dentro del MI6 protegieron a Edom, asignando misiones secretas a oficiales veteranos de la organización, ocultando su actividad y desviando dinero de la SIA (Single Intelligence Account o Cuenta Única de Inteligencia) para financiar la operación secreta. Edom tenía sus propias fuentes, de riqueza y de inteligencia, extraídas del oro de los Habsburgo y de contactos establecidos desde los tiempos de Vámbéry.

Mientras Edom dormitaba oficialmente, medio olvidada, la operación continuaba de forma extraoficial, protegiendo al Reino Unido de los vampiros y otras amenazas sobrenaturales al tiempo que intentaba desvelar sus secretos.

El ala de investigación empezó por fin a producir resultados útiles. El trabajo con la nueva ciencia de la secuenciación del ADN descubrió una conexión bacteriológica con los vampiros, mientras la estación de vigilancia Blacknest se dedicó a buscar rastros de vampiros, así como pruebas de bombas soviéticas.

1977-1978: La caza del topo

Incluso antes de que Edom se reactivara oficialmente para dar caza al misterioso topo, la operación estaba íntimamente implicada en el caso. La red de informadores y espías de Edom en Rumanía descubrió que había un topo muy bien situado en la inteligencia británica que pasaba secretos a la Securitate y luego a la central de Moscú. Después de que el MI5 fracasara en su intento de encontrar al topo, el MI6 se tomó una venganza largamente aplazada por viejas afrentas que se remontaban a la década de 1950, y sugirió que se reactivara a Edom para investigar una conexión sobrenatural. La caza del topo fue casi una victoria pírrica para Edom. Encontró al topo –Nicholas Loman, un traductor de familia rumana– y tapó la filtración, pero en el proceso descubrió una vasta red de corrupción en Inglaterra y perdió prácticamente todas sus redes en Rumanía. Los acontecimientos de 1978 transformaron de nuevo la Operación Edom. Los duques fueron reorganizados, y una nueva generación de oficiales Edom tomó el cáliz. La rejuvenecida Edom, rebautizada como Sección de Operaciones de Investigación, (IOS) adquirió carácter oficial dentro del SIS.

1978-1990: Sangre nueva
 
Mientras se ocupaba de los restos de la red de infiltración de Drácula e intentaba reconstruir su red rumana con la ayuda de la CIA, Edom se vio envuelta en el infame problema irlandés. Los disturbios en Irlanda del Norte habían estallado de nuevo con la escisión del Ejército Republicano Irlandés en el IRA Oficial y Provisional, así como en el Ejército de Liberación Nacional Irlandés (INLA). La nueva respuesta, más agresiva, de los británicos incluyó la aprobación del uso de métodos rechazados por gobiernos anteriores.

Durante las décadas de 1980 y 1990, uno de los activos británicos más importantes era un espía dentro del IRA Provisional, un espía tan bien situado que se afirma que se dijo a la policía que no actuara ante ninguna información que pudiera conducir a su detención, o incluso que elementos del Ejército británico fueran cómplices de los asesinatos. Esta joya de la corona era conocido por un nombre en clave: STAKEKNIFE.

El nombre era una broma privada de Edom, en referencia al uso que hacían de un vampiro para intimidar y subyugar a los enemigos del Estado. A lo largo de la década de 1980, Edom dirigió un vampiro bajo la tapadera de Unidad de Investigación de la Fuerza en Lisburn. Las técnicas desarrolladas en esta operación interna servirían de base para los esfuerzos posteriores de la operación contra los extremistas yihadistas.

1990-2007: Regreso a Rumanía

Aunque Edom siguió desempeñando un papel cada vez menor en la lucha antiterrorista nacional, la caída del régimen de Ceausescu, el colapso de la Unión Soviética y la posterior apertura de Rumanía a Occidente brindaron a Edom la oportunidad de regresar con fuerza a Transilvania. Restablecieron el contacto con los szohordoks que les quedaban e investigaron el alcance de la conspiración de Drácula en Rumanía.

Sin la voluntad rectora de su Amo, los propios sirvientes y redes de Drácula estaban listos para tomar el poder. Convencido de que tenía vía libre, al menos a corto plazo, Edom se apresuró a reconstruir sus redes en el país adelantándose a sus rivales. En el centenario de la operación original, Edom estaba de nuevo plenamente establecida en la tierra más allá del bosque.

2007: Proyecto Montseir

Aunque el 9/11 desencadenó la Guerra contra el Terror, fueron los atentados del 7/7 de 2005 en Londres los que alertaron al Gobierno británico de la amenaza que suponía el terrorismo autóctono. El espacio de batalla había cambiado: los jóvenes radicalizados de Londres podían comunicarse con líderes y entrenadores terroristas de todo el mundo y dejarse influir por ellos. Al igual que el comercio y las comunicaciones, el terrorismo se había globalizado. La misma amenaza existía tanto dentro de la sociedad británica como en países lejanos.

Al igual que en 1977, Edom ofrecía una respuesta. Desplegado adecuadamente, un vampiro podía cazar y destruir terroristas tanto en su país como en el extranjero. Negable, imparable, infinitamente eficaz. Una vez más, los agentes de Edom entraron en Rumanía y se pusieron en contacto con los servidores del conde Drácula.

La centenaria operación del sueño de Peter Hawkins llegó en forma del Proyecto Montseir. Basándose en el trabajo de generaciones de analistas, científicos y espías del MI6, Edom fue capaz de convencer –u obligar– a Drácula y sus congéneres para que trabajasen para el Reino Unido y sus aliados, y les guio para que pusieran sus monstruosas habilidades al servicio de la Guerra contra el Terror.


2011 - 2051: VVHMH

Cuando el 24 de Diciembre de 2011 la magia regresó, Edom no fue demasiado afectada una vez que habían convivido con lo paranormal desde siempre. El Sexto Mundo lo cambió todo, pero Edom ya tenían un pie anticipado al caos que fue el Despertar.

La primera aparición de una variante del VVHMH, Ghilani wichtiviridae, se remonta a los últimos días de 2011, cuando se observaron por primera vez necrófagos en África. En ese momento no estaba del todo claro que un virus fuera responsable de la transformación y pasarían unos 40 años antes de que se demostrara este hecho, pero Edom siempre mantuvo como una prioridad el estudio del vampirismo bajo el nuevo enfoque, encargándose de seguir el estado del arte en materia de vampirismo.

Después de la goblinización en 2021, también se observó un aumento de la aparición de necrófagos. Ahora se cree que los niveles de maná que desencadenaron el evento masivo de expresión del metatipo orco y trol también dieron lugar a la expresión de la variante del VVHMH Ghilani wichtiviridae, que había persistido en el ADN humano y metahumano hasta entonces. Sin embargo, en ese momento, las dos observaciones se atribuyeron al mismo fenómeno, por lo que durante mucho tiempo se creyó que la infección por VVHMH que produce el necrófago era una forma del proceso de goblinización.

En 2022, los científicos Jeffrey y Samantha Krieger comenzaron a investigar el fenómeno del necrófago, pero el descubrimiento del virus vampiro humano-metahumano quedó en manos de otros.

Ghilani Vrykolakivididae, la cepa primaria, fue aislada en 2034 por el Dr. Emil Harz y la Dra. Carla Greenbaum.

La forma “básica” del virus. Afecta a todas las formas de metahumanidad, transformando a los infectados en varias paraespecies según su cepa base. A pesar de estas diferencias, todas las variantes vampíricas creadas por la cepa base sufren una pérdida crónica y constante de esencia que solo se puede detener ganando nueva esencia. Los vampiros se aprovechan de la esencia vital de sus víctimas, depurándola desde la sangre que les consumen. Suelen ser delgados y pálidas salvo que mantengan una buena alimentación.  
Los vampiros enferman en una hora si consumen cualquier cosa que no sea sangre, y tienen reacciones particularmente malas al alcohol.
Aquellas victimas que no mueren directamente en la transferencia a menudo se encuentran compartiendo la aflicción del vampiro al no ser capaces de regenerar su esencia perdida.

Las teorías actuales suponen que esta condición es similar a la pérdida de esencia causada por la implantación de cyberware; la interacción cuerpo/espíritu es dañada por el vampiro al apropiarse de un fragmento de esencia de la victima, dejando esta irremediablemente menguada en su espíritu. Esto explica que los vampiros no puedan alimentarse de sangre donada al no ir impregnada con la esencia del donante.

La mayoría de los vampiros muestran una serie de poderes que incluyen sentidos mejorados, inmunidad al envejecimiento, veneno y enfermedad, la capacidad de convertirse en niebla y una rápida regeneración de tejidos dañados.
Muchos vampiros muestran habilidad mágica, y la transformación a veces desbloquea potencial mágico oculto. Estos vampiros son capaces de aprender y usar magia al igual que un humano. Los hechiceros vampiros son probablemente la fuente de algunos poderes vampíricos legendarios, como la capacidad de transformarse en animales o de hipnotizar a las víctimas.
Los vampiros también manifiestan una alergia severa a la luz del sol y/o a otras sustancias u objetos, dependiendo de los antecedentes del vampiro individual. Estos pueden ser ajo, madera, plata y/o objetos sagrados. Los vampiros tienen menos flotabilidad que los metahumanos. Los vampiros también tienen una debilidad adicional de letargo inducido en caso de falta de aire. Si un vampiro se ve privado del aire durante un período que depende de su esencia real, cae inconsciente indefinidamente. Sin embargo, si el vampiro se expone nuevamente al aire, recupera la conciencia en un minuto.

Fue en 2037 que la IOS (Edom) reconoció sus actividades (no todas, y por supuesto nunca el Dossier Drácula) al resto del SIS, dejando de ser una organización dentro de otra.
Entre los cambios que trajo el Sexto Mundo, descubrir que una rama de tus compañeros llevaban años trabajando con y contra vampiros no fue ni relevante para los trabajadores del SIS. 
 
En 2039, John Russell Jarka y Michelle Criscione aislaron una segunda especie de Ghilani, Ghilani moneriviridae, denominada VVHMH-II. Ambos investigadores habían descrito anteriormente transformaciones provocadas por VVHMH-II con un cuadro clínico que lleva su nombre (el síndrome de Jarka o Criscione), lo que luego condujo al rastreo de la segunda variante de VVHMH. 
 
En 2046, Richard Bruckner y Günther Langer aislaron una subespecie de Ghilani vrykolakiviridae, que recibió la designación VVHMH-Ia y el sufijo sanguisuga. Esta forma transmite la transformación en un Nosferatu.
 
En 2049, Samantha Krieger sucumbió a una infección por VVHMH después de muchos años de investigación sobre el fenómeno de los ghoul. Jeffrey Krieger finalmente logró aislar la tercera especie de virus Ghilani wichtiviridae, VVHMH-III, en 2051, pero también murió un año después por infección con el virus que había descubierto.
 
A día de hoy, la división científica de Edom es en la sombra probablemente la mayor fuente de saber sobre el VVHMH, superando gracias a sus estudios prácticos desde el siglo 19 a otras agencias de renombre.
 
La "abundancia" de vampiros en el Sexto Mundo (SBAs en la jerga Edom, Activos Biologicos Especiales) ha permitido a Edom organizar incluso pequeñas unidades de vampiros capaces de acometer sus misiones encubiertas habiendo logrado desde la década de los 30 varias intervenciones críticas solo posibles para operativos SBA. 
 
Han aflorado entre los agentes de Edom también excesos de estos operativos SAB dentro y fuera de misiones, que han sido silenciadas por Edom a fín de evitar la atención sobre sus operativos mas valiosos. 
Si bien el uso de SBAs no supondría un perjuicio a la imagen del SIS según las estimaciones proyectadas, su impunidad a pesar de sus excesos sí supondrían un daño político y un previsible escándalo para "D", Director de la IOS, "C", Director del SIS, e incluso del propio Ministro de Exteriores y del Primer Ministro.




No me miréis así, si en shadowrun ha habido elfos desde antes del Despertar, la magia solo se retiró, el pasado es Earthdawn, e incluso el VVHMH se nos dice que existió oculto durante el quinto mundo ¿por que esta mezcla de espionaje y Drácula no? ¿No hay espionaje, o spy-fi, acaso en shadowrun, y no se caracteriza acaso por mezclar magia y cyberpunk? Está mierda funciona.




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